Nos vamos a Rancagua a contribuir a la alfabetización digital, esa es nuestra nueva cruzada, nuestro próximo reto y creemos una obligación, un deber patrio, acudir a las tierras ignotas con nuestra tecnología y conocimientos superiores a enseñar a expresar a los pobres aborígenes.

Y esta vez ya no dirán tus huestes "¡Dios lo quiere!" sino "NO podía, no quería, no lo lograba, no me salía, no era factible, posible ni transable...pero igual escribí, porque no soporto un minuto sin que se preocupen de mí"
Esta es la gran enseñanaza que hemos recibido del maestro y a ella nos vamos a dedicar. Nuestro maestro, al igual que un derviche, danza elevando sus faldas mientras sus manos (y su Marlboro) realizan movimientos centrípetos, uniendo con sus manos el micro y el macrocosmos, difundiendo las gotitas de sudor de su sabiduría como las partículas de Pflügge. Y mientras Pepito el sufí tocará una de sus melodías, basadas en los ritmo mixolidios que divertían a los monjes del Monte Athos, por que al igual que Estambul es el nexo común de tres religiones tú, tu blog y tu estilo corintelladesco, alambicado y edulcolorado es el punto de partida de la nueva sabiduría tecnológica y popular. Gracias al maestro, cualquier petardo del mundo, podrá escribir sus sandeces en internet y se creerá opinión pública y nosotros diremos, maestro tu altura de miras ha traído la democracia cibernética y ya es hora de que haya elecciones en ACHIB y seas, por aclamación, presidente electo de la misma.

Su coraje inmenso, ya descrito en su autobiografía apócrifa "De ignota procedencia", su talante evangelizador, su casta suprema, y su intelecto colosal necesita de nuestra ayuda, especialmente en estos momentos en que su tiempo se divide entre la familia, aquejada de diversos males, y la presneica irrenunciable en Rancagua.
Hemos rezado como monjes jerónimos incansablemente por la salud de los suyos, esa misma salud que hoy le hace tener más visitas que en los últimos dos meses de decadencia en los que se encontraba. Con los relatos de "Cirugía de Cuerpo y Alma" ha hecho llorar a muchos y varios guionistas están interesados en comprar la historia donde entre cebolla, llanto, héroes y sus palabras rococós han hecho que varios pasen a dejarle comentarios que van desde el rol del óxido nítrico en la sepsis hasta hechos paranormales de enfermos y santones.
Nos ha conmovido su determinismo, su férrea voluntad de ser el misionero - no confundir con la postura del mismo nombre- tecnológico que va a los últimos rincones de la civilización - Sí, un día aparecerá en el iglú de unos esquimales que estarán fornicando placenteramente, entrará, y con su sonrisa incansable, su profesionalismo que le confiere superpoderes de controlarlo todo y su capacidad de encontrar amigos, les dirá: "dejad el sexo para más tarde, ahora toca el evangelio digital, pues yo soy vuestro profeta" y los esquimales se convertirán, contratarán una línea wireless (la fibra óptica falla a temperaturas extremas) y harán un blog de "colló de mico" (cojón de mico)- y nosotros lloraremos de emoción y como Enrique V en Azincourt diremos "Sí, nosotros estuvimos allí" y nuestros vasos rebosantes celebran con júbilo la nueva.

Maestro, de corazón, siempre te hemos admirado pero hoy, por saber que tu cruzada es irrenunciable y no admite adversidades que la detengan, nos ha seducido de tal forma que allá donde tu vayas, irán, nosotros, tus adeptos.

Gracias maestro, de corazón.

El maestro ha vuelto a fumar. Él mismo lo ha dicho, y nos preocupa. Sólo tenemos la duda que si es sólo un flashback de esos donde su memoria lo traiciona o de verdad ha vuelto a fumar y promocionar los cigarros del vaquero gay. A su edad sexagenaria, el síndrome metabólico, asociación de diversos factores de riesgo cardiovascular, acechan como los nativos americanos en la típica película de cowboys.

Tenemos una duda razonable, como los buenos jueces de las series americanas, respecto a la última parábola del maestro titulada, con bastante mal gusto por cierto: "I'm OK, you're not. "

En primer lugar, que el maestro, como Pedro antes de que cantara el gallo tres veces, renuncie a Coelho, reniegue de su misma prosa alambicada y edulcolorada, nos parece asombroso. Biógrafos, apunten la fecha del 4 de septiembre, como la del día en la que el maestro renunció a uno de sus referentes, a uno de sus ídolos, a uno de esos escritores con los que comparte estilo corintelladesco.

En segundo lugar, expone su repulsa a la auto-ayuda, por lo que pensamos que su personaje en Second life puede pasar en breve a mejor vida. Es una lástima, desde la Comunidad Pinkerton Internacional, nos habíamos propuesto comprar unos terrenos en el Santiago de Chile virtual para que los alumnos de la filosofía del corazón se matricularan en la Universidad Second Arancibia y se titularan en la Filosofía del Corazón. Seríamos, ya no seremos, la primera universidad del mundo en impartir títulos de esta disciplina. No hace falta decir, está de más, que dos de las asignaturas serían "Vida y Obra de Paulo Coelho, el autor de la lágrima fácil y edulcolorada" y "Cómo escribir un libro de auto ayuda según la doctrina universal del corazón".

Estos dos puntos, por sí mismos hablan de un cambio en la dimensión universal del maestro del mismo modo que Kandinsky abandonó Neue Künstlervereinigung München para pasar al grupo der Blaue Reiter para volverlo a abandonar y dedicarse de lleno a la abstracción.

Para muestra una de las frases que como lápidas sepultureras deja caer el maestro sobre nosotros -en la misma linea de su ya éxito de ventas "el amor es un misterio"- "Y tú, de verdad, ¿Cómo estás?- Como las huevas, me dice, no ha vuelto a llamar, lo echo de menos como loca, no sé que hacer. Me duele el alma. Estoy llena de él, y al mismo tiempo vacía. No sé, no sé... Y llora. Yo me paro, la abrazo y nos fumamos un Marlboro, callados."

No maestro, no. Así, no. Y menos fumando.